El niño del mugreluco

Y un día mi vida cambio 360 grados


La disyuntiva estaba ahí, lo dejaba de ver después de habernos acercado un chinguero,o cambiaba la forma en la que había visto la vida durante más de dos décadas. Claro que no se pensó ni un minuto, había que poner un rumbo nuevo a las cosas.

Y como siempre ahí te van las sorpresas, Dios es Méndez carajo!, no cambiamos mucho, porque a el igual que a su padre le gustaba trasnocharse, le encantaba salir a los contratos enfundado en su traje negro, el cual le solicitó a su madre vía telefónica -¿que quieres Mauri?- preguntaba nuestra bien amada Pantera, a lo que el cachorro respondía de pié, derechito, como si estuviera delante de la Sra Jefe - quiero que me mandes mi traje negro mami-, para que? replicaba su madre -pues para ponérmelo porque ya lograste lo querías,yo, ya soy cantante--

Y desde ese día este viejo cuenta con el regalo mas grande que la vida me pudo haber otorgado, la compañía de uno de los seres más importantes y asombrosos en mi vida, el que sin lugar a dudas me volvió  una mejor persona, el que a golpe de ensayo y error me puso mas cerquita cada vez del termino papá pero de igual manera me hizo comprender lo que cuesta emprender la aventura de la formación, la cual dicho sea de paso es muchas veces mas "deformación".

Enseñarle a usar la plancha, o mostrarle como hacer un huevo revuelto poniéndole la mano en la sarten.Pedirle que se sintiera tranquilo en su cuarto porque estaba al cuidado de su abuela (que tiempo después se dio cuenta que esta estaba, si, pero acompañándolo desde su urna funeraria en el  mismo cuarto).

Terminar la jornada mirándolo enfundarse en su "mugreluco" amarillo el cual ya tenía las "patas" cercenadas pues ya había pasado sus mejores días, mientras se quedaba dormido en mi regazo durante la película en turno.

Caminar la senda del sentimiento, ser testigo al mirarle tocarse los labios asimilando apenas, las sensaciones encontradas al permitirse ser arrastrado por  el sexo femenino ondeando como caro trofeo una cobijita, que le bajara tiempo después su tía Pato.Estar con el como en su día estuvo mi madre, cuando aprendió que el amor nos puede dar las dentelladas más desgarradoras después de llevarnos al cielo.

Verlo terminar una etapa académica y darnos el gusto de mirarlo por primera vez con toga y birrete al egresar del Conalep.

Ahora lo veo departir algo de tiempo con el patriarca, preguntando sobre sus y nuestros mejores viejos tiempos, siendo amigo de mis amigos, acompañando a la guitarra los berridos de su padre, convirtiéndose en algo más que el hijo del Mayes estepario y Adelita, a punto de establecer senderos propios y no tengo más que agradecerle a la vida el haber y seguir viviendo la experiencia de estar en su andar, esperando con ansia que sea por lo menos un hombre honorable (mas que honrado) y se convierta en un buen hombre (más que en un hombre bueno).

Sobra decir que soy un padre orgulloso de su hijo por lo que no es, solo espero de igual manera estarlo por aquello que construya.

Por eso mi niño del mugreluco, cabrón de los ojos de mar, que tengas un muy feliz cumpleaños

Te amo Leo, gracias por estar y por ser.