viernes, 8 de julio de 2011

Recordando al Angel de la noche

Hoy me dio por recordar a uno de los personajes, y digo personajes porque a este no se le puede encasillar de ninguna manera, si se le tuviese que poner una etiqueta seguramente sería el de amantisimo mexicano.

Simón simón, ya se que hablaré de cosas que ni mi hijo o mis alumnos recuerdan, pero que carajo!, este es mi espacio así que ahí les voy a presentar al original "Charro negro" al hijo predilecto de Tlacotalpan Veracruz, el Sr Germán Dehesa.

Lo conocí a través de un programa de esos que desafortunadamente ya no se hacen: Con N de Nacho, chingado, que delicioso era saber que los libretos se los chutaba don Germán y la música el increíble Nacho Méndez, y ahi te voy a buscarlo en los periódicos, y en su programa de radio, donde en medio de la chacota nos enseñaba a amar a nuestra ciudad y por extensión a nuestro país.Deliciosas tardes con los talentosos Nauyacas, tirándole al pri y acérrimo enemigo de Arturo Montiel.

Del tipo que deberían ser todos los intelectuales, sin pretensiones y cerquita del popolo, todos aprendimos con el, yo por mi parte aprendí que la cultura no está en decir o no malas palabras, si no en saber como utilizarlas sin convertirlas en majaderías.

Me regaló sin enterarse, como a muchos el gusto por otro de mis titanes, me aventó al oído y a la jeta al hijo del Mayor Sabines, mi compañero, mi eterno Cyrano y Pana.

Sin más ahi se los dejo, a los que lo conocen, para que lo recuerden y a los que no saben quien es, pues conozcan una muestra de que en este país no solo tenemos héroes de porquería que instan a nuestros chavos a convertirse en estúpidos anhelantes de poseer trocas, viejas, droga y armas, si no que este país también puede parir seres que nos llevan a conocer el poder de saber, de conocer, de soñar que nuestra historia es el motor para convertirnos en mejores Mexicanos. Vaya pues un entrañable recuerdo para aquel que enseñó lo chingón de los libros a su chofer, prometiendole cien pesotes por cada libro leído y discutido durante sus trayectos cotidianos, (valga decir que nunca se los pagó) para ese al que su jefe le decía que las srtas que estaban en la banqueta de Insurgentes eran oficiales de la forestal y les habían encargado cuidar un arbolito a cada una, pero como estaban tan cerquita de la calle tenían que vestirse "tan llamativas" para que no las atropellasen. Un recuerdo pues al recontra cabŕon Charro negro, El gran Germán Dehesa




























2 comentarios:

  1. Porque esta gente que vale y se hace valer muere?....es arrancado de maneras todas y nos priva de su ser de su palabra que regala y enaltece.....
    Que pena y que rabia...
    Sabiamos que los viernes le tocaba, todos lo sabiamos y algunas veces le seguimos el consejo...y para recordar (solamente) HOY TOCA

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  2. amiguisima gracias por pasar, te quiero0 mucho, que bueno que coincidimos en esto tambien

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Mientame la madre, proyectate o lo que sea, pero deja algo que me retroalimente